Desde tempranas horas de la mañana, iban llegando al lugar del evento los hermanos y las hermanas que serían parte de este importante paso en el camino de creyente. El bautizo es un acto simbólico que significa morir al mundo y comenzar una nueva vida en Cristo Jesús. 

La palabra de Dios fue ministrada por el Ptr. Mario Lima Vacaflor quien animó a todos los presentes a dar ese paso de fe para seguir adelante y no mirar atrás, “hay fiesta, hay gozo y la iglesia se regocija por los nuevos hermanos y hermanas”, mencionó.

Los testimonios de quienes se bautizaron fue de fe y convicción de no volver atrás y de haber tomado el mejor camino de salvación para sus vidas.  Fue un tiempo de cielos abiertos sobre Cochabamba y mucha algarabía para quienes pudieron llegar a esta primera etapa de este largo camino de perseverancia y sacrificio. Gloria sea a Dios.